Suma y sigue y ya van dos ( de setecientos)

Hoy quiero contar un cuento;un relato corto de los que dejan buen sabor y no defraudan.Una historia de varios siglos y tan solo un par de meses que aplauden por haber mantenido constante la felicidad de un alma tan vacía y miedosa como la mía. Y no quiero volver a explicar la perfección cuando tiene nombre y apellidos no escritos en los libros. Esas marcas como heridas que dejas cada vez que te vas y curas con tres gestos cuando llegas;este cuento es por las veces que crees que no te pienso y llegas a mi con la misma fuerza arrolladora de siempre. Es por ti y por mi: por rendir honor a tus caras de desprecio cuando digo tonterías y por tus manos mágicas capaces de cualquier cosa por estirarme más la sonrisa. Y ya que piso fuerte y me mantienes en este mundo tan segura agradezco tu constancia y tu presencia en mi más absoluto de los desordenes al cual llamo "vida". Pero ahora lleva tu nombre y comparte tus días con la máxima implicación posible para mantener viva esa esencia que tu me enseñaste y que juntos creamos e hicimos crecer como algo más que nuestro. Hoy digo que me quedo, que aquí estoy más que a gusto en tu calor y me quedo, lo decido firmemente y lo aclaro para que no haya ninguna duda, que eres lo mejor;el mejor de los mejores y que cierren la ciudad que yo me quede en tu cama, que no quiero más guerras que de besos y caricias y que no necesito más aire que el que tu respiras en mi pecho.Que es por ti quien soy en este momento y que quiero seguir siendo tu lado izquierdo del corazón mucho tiempo. Te quiero hoy y mañana, te quiero para mi siempre y te quiero aquí. Ven.