No todos estamos tan absortos de la realidad.
No se trata de un análisis superficial de la historia sino, acércate , un poco más de introspección. No consisten en la incoherencia como modus operandi social sino que la realidad te devuelve en modo de bofetada todo lo que no querías escuchar. Ahora sí.
Nos creíamos los reyes y siempre fuimos esa parte mínima del pueblo , esa parte que nunca coincide y nunca se adapta.
Y mientras yo bailaba como siempre, ya no estabas.
¿Y ahora qué? Que hay de los planes y las certezas , que hay de todo lo que habíamos hablado. Qué hago aquí otra vez , en el mismo mar, en el mismo fango.
Ahora que vamos a hacer si ya no hay más líneas que cruzar , si yo estoy perdida y tú no estás. En esta realidad absurda que has llenado de miedos ya no puedo abrazarme por las noches sin que se me escape una lágrima cuando no me ves. Lo siento pero no tengo ganas de que me duela y nada me llena , si no huele a casa,' nada me sacia cuando estoy en la cresta de la ola pero tú sin embargo me paras los pies para recordarme que firmaste tu defunción antes de nacer. Y ante eso , qué puedo hacer si quieres esconderte. Qué quieres que te recuerde, que merece la pena.
Quizá tenias tu razón y am final soy yo la que no puede esperar para que no me quieras bien , para pasar por ti sin pena ni gloria como pasan los días y luego no vuelven. Eso no. Esta vez ya no.